2/12/10

Back Home.

Te subes al autobús con tu falda excesivamente larga y tu pañuelo rodeándote la cabeza. Contando las flores que llevas bajo el brazo. Disimulando que eres consciente de que todos los demás también disimulan que te miran, y que saben que tú sabes que lo saben.
Te subes con tu mochila de Billboard llena de chapas de calaveras, estrellas y frases de grupos emo. Miras con desprecio al infinito y te sientas en el libre del final, a flequillazo limpio, perdonándonos la vida.
Te subes el último aunque llegaste el primero. Dejas que todos pasen antes. Las marujonas, los barrigones, el conductor, las colegialas, los perriflautas y hasta los perros; todos van antes que tú. Quizá estás acostumbrado a estas alturas a su falta de tacto y a sus privilegios. A nuestra falta de tacto y nuestros privilegios. Tu piel es marrón oscura como el chocolate suizo, y vas cargado de maletas que parecen no pesarte, aunque todos las miran como si fuesen desproporcionadamente gigantescas para ti. Tú te ríes en tu interior, porque vivimos en la ignorancia de lo que es trabajar de verdad para ganarse la vida. Y tú lo sabes desde pequeño.
Te subes al autobús, buscando si hay niños guapos y luciendo la carcasa asquerosamente cursi de tu último móvil táctil. Masticando algún chicle que debe saber a "gloss". Te miro con desprecio y me devuelves la mirada al instante, desafiándome un segundo, después haciéndote la loca. Te crees que te envidio porque sabes que te vistes como una putita rica para ir a la facultad, que vas a la última moda según la revista Vogue y que no cargas ninguna mochila cutre como hago yo. Tú llevas tus apuntes en un bolso de cuero rosa que te ha costado un pastón. Con la marca cosida en letras doradas en un filito del bolso.
Te subes al autobús, con tu niño de la mano y cara de no dormir. Pidiendo perdón a diestro y siniestro porque el pesado de tu hijo está pisando a todo el mundo. Le dices que no mire tanto al negro. No te hace caso. Intentas sujetar todas las bolsas, más el maletín de piel, más el chaquetón del niño, más su mochila de Bob Esponja. Y qué va, no puedes ser Terminator.
Te subes al autobús, con tu moño en lo alto del casco y tu chándal gastado de Cactus de las Supernenas. Nadie quiere que te sientes a su lado porque todos piensan que eres una "choni del polígono", o "cani", basicamente. Llevas colgadas al cuello tres medallitas de oro y vas susurrando algo que creo que es de una canción del Barrio. Cruzas el bus entero con la cabeza más alta que las ventanas a modo de defensa. Sabes que te creen inferior, y sabes que no lo eres. Sabes que tienes dos padres que adoras y a los que tratas genial, que trabajas día y noche por esa niña que tuviste a los diecisiete años, tu Manuela, a la que quieres "máh que a tu vía", y sabes que el resto no debería importarte.
Te subes al autobús, con tus rastas cayendo por la espalda y tus labios carnosos y negros como el azabache. Miras cómplice al chico de las maletas gigantes y te agarras a una barra sin mirar a nadie más. Una parte de ti piensa que si no miras a nadie, nadie va a mirarte a ti. Pero todos te han mirado, el niño de la mochila de Bob Esponja te señala con el dedo y la niñata del "gloss" frutas del bosque te ha analizado con asco de los pies a la cabeza. Tu vestido con motivos geométricos de colores le resulta divertido a la señora de las flores, a la que sonríes al cabo de un rato. La cani te pide paso, le da un codazo a la pija y ayuda a la madre del niño a levantarse cuando frena el autobús. Después ésta, con mucho disimulo, vigila que no falte ni una bolsa cuando se baja la cani. El negro y la negra han notado ese gesto. La niñata pija saca su iPod del bolso y se coloca los cascos para no escuchar a nadie. El niño que hace un momento señalaba a todo el mundo, ahora decide tirarle de los cascos a la pija, que mira a la madre del niño con cara de santurrona para que sea ella quien riña a su hijito. Al puñetero niño para que deje de molestarla.
Durante todo ese tiempo, la niña que se cree diosa del "goth" ni se ha molestado en subir la cabeza y mostrar el puto ojo derecho, que lleva tapado a lo "rebelde incomprendida". Cree que la hace más madura y más moderna dárselas de indiferente, de nihilista y de gilipollas.
En la siguiente parada te bajas con tus flores.
En la siguiente parada te bajas con tu maleta.
En la siguiente parada te bajas con tu iPod.
En la siguiente parada te bajas con tus rastas interminables.
En la siguiente parada te bajas con tu diablo en miniatura.
En la siguiente parada te bajas con tu flequillo y tu ropa oscura.

¿Cómo os puedo querer tanto sin tener ni puta idea de quiénes sois y a pesar de la bestial caña que os meto?
Felices Fiestas, Feliz Navidad, Feliz puente, Feliz Año que se acerca para todos vosotros. Para todos por igual. No hagáis caso del desprecio de personas como ustedes y personas como yo. Todos tenemos los mismos miedos, las mismas pesadillas, los mismos orgullos. No es eso lo que somos.
Todos creemos disimular lo pequeños que nos sentimos con materiales y ropas absurdas, con señales ridículas que nos separen del resto, como si eso fuese lo que hay que buscar, lo que deseamos en la vida.

Lo único que tengo en este mundo es la pasión. Si tengo algo de dinero, no es mío. Si tengo algo de estudios, no venían conmigo. Si tengo a alguien, puedo perderle en cualquier momento. Pero no pueden arrancarme la pasión. Y hoy mi pasión es vuestra junto con esta extensa entrada de un blog de tres al cuarto.
Os juzgo a todos, y os respeto como nadie sobre la faz de la tierra. Sois vitamina para mí. Y, quién sabe, tal vez un día descubras que es todo mucho más fácil cuando cedes el asiento, cuando sonríes a los niños, cuando olvidas que es distinto el color de la piel, cuando centras tu atención en esos que te rodean y no en la música estruendosa de tus malditos auriculares de marca.
Se ve mejor sin flequillo.
Se ama mejor sin careta.

Feliz Navidad, hermanos. Que Dios sepa recordaros de algún modo que os ama y que no estáis solos. Por muy difícil que sea a veces.

2 afectados:

Patty dijo...

Hola

Mi nombre es Tania y soy administradora de un directorio de webs/blogs. Me ha gustado mucho tu blog. Quisiera intercambiar enlaces. Puedo agregar tu blog en mi directorio para que así mis visitantes puedan visitarlo tambien.

Si te interesa, escribeme al mail:
tajuanchita@gmail.com

Saludos
Tania

Tejeletras dijo...

Feliz entrada en el año, Yellow :P

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